Desde Provocando la Paz queremos condenar el brutal atentado a un convoy de personas evacuadas en la zona de Al Rashidín, al oeste de la ciudad siria de Alepo. La muerte de al menos 68 niños, 13 mujeres y personal humanitario que colaboraba en la evacuación hacen que este gesto sea más cobarde y execrable. Atacar a civiles desplazados y personal humanitario con esa brutalidad es un crimen contra la humanidad. Ya sabemos que todas las guerras son macabras y sin sentido, pero exigimos en todo momento el respeto a la ley humanitaria internacional, incluyendo la protección de hospitales, escuelas, campos de refugiados, convoyes humanitarios y convoyes de personas evacuadas.
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